Publicado el 30/07/2018
1. Como norma general, el asiento de una silla de ruedas debe ser entre 2 y 4 cms más ancho que las caderas de la persona y es de vital importancia revisar que la silla esté homologada para el peso del ocupante y, además, debe resistir el peso de la persona, las más comunes tienen una resistencia de peso de los 100kgs.
2. Existe una gran variedad de modelos de sillas plegables sin necesidad de herramientas y que ocupan poco espacio, las cuales son las más recomendadas para lugares reducidos. Dependiendo del uso que se le vaya a dar (deporte u ocio), cuánto más ligera sea, más funcional y práctica les va a resultar tanto para la familia como para el paciente. De igual manera, es importante que cuente con reposapiés abatibles.
3. Existen unas con y sin apoya brazos. Elige la que mejor se adapte dependiendo de la condición de la persona a utilizarla. Inclusive, existen algunas con los apoyabrazos removibles, que se hacen muy útiles en el día a día.
4. En el caso de que se necesite un apoyo adicional a la silla, es importante revisar que ésta sea compatible con esos accesorios a emplear. En el mercado existen innumerables de estos para lograr mayor confort en el paciente.
5. Revise el material, que sea resistente como de acero o aluminio, antioxidante y que soporte las condiciones climáticas de su ciudad.
Así que con estos tips, vas a poder ir más informado a la tienda o al lugar especializado en equipos médicos y elegir la que mejor se adapte a la persona ocupante.
Por: Maritza C. Guédez